¿Y esos miedos…? (I parte)

Hace un par de días posteé en mi muro en Facebook una imagen que me confrontaba muchísimo. Creo que todos le tenemos miedo a algo y, en el peor de los casos, a alguien. Los miedos se presentan de muchas maneras. No soy psicóloga para definir qué es el miedo y que lo produce, pero muy bien podría aportar algunos puntos desde mi experiencia. Por ejemplo, siguiendo la lógica de comentarios que llovieron tras la publicación, muchos (unas gran mayoría) afirmó tenerle miedo a una rana, del tamaño que sean. Vean el post.

Creo que los miedos son enseñados por un contexto. Desde pequeña le tuve miedo a la oscuridad. Me provocaba un pavor enorme. Claro está, en mi casa, en mi barrio, los juegos de los adultos hacia los niños se basaban en que si no hacía esto o aquello “te meterían en el cuarto oscuro”, en contraste a ello, tengo algunos recuerdos de la década del ´90 del siglo pasado, cuando el Período Especial en Cuba hacia que luego de las 8:00pm el vecindario se volcara hacia los portales para refrescar y para compartir de esas horas donde solo la luz provenía de la Luna.

Otro de mis miedos, y aquí hago un acto de exorcismo, es a lo extraño. Como casi todos, salir de mi zona de confort me produce algunos temores. ¿Cómo será? ¿Qué habrá allí? ¿Qué veré? Pero a la vez, me produce curiosidad, entonces la curiosidad a veces me lleva a ese “lado nuevo”. ¿De dónde viene ese miedo? No lo sé. Recuerdo cuando tenía 11 años que nos mudamos de nuestra casa a un lugar que ni remotamente conocía, aunque estaba en la misma ciudad. Una casa con mejores condiciones físicas que en la que vivíamos, pero nueva al fin, creo que no dormí bien en un mes.

El ridículo. Mi mayor miedo es quedar en ridículo. Antes creía que no saber algo era malo. Pensaba que si no tenía alguna respuesta en clases quedaría en ridículo. Ilusa yo en pensar de esta manera, obviando el hecho de que todos los días se aprende y que nadie se la sabe toda. Después de muchos años, y por supuesto, habiendo vivido otras experiencias, el ridículo se ha convertido en cenizas. Hoy le temo más a pensar que me la sé toda que a no tener cierto y determinada respuesta.

El miedo individual hace daño, muchísimo. Los miedos frenan y te paralizan. Son como una gran soga que te hala y no deja que el futuro sea más próximo a ti. El miedo es como una maquinaria de mutilar sueños, deseos. El miedo deja que tus potencialidades se “ponchen” sin saber cuál es lo nuevo que está por venir. La agrupación cubana Buena Fe ha compuesto una de las canciones que mejor me han ayudado a pensar en mis miedos y soltarlos. Me queda una pregunta: ¿y los miedos colectivos qué son?

Video Clip. Miedos. Buena Fe/Cuba